El juego de mesa El monstruo de colores
El Monstruo de Colores es un juego de tipo memory pero cuyo principal atractivo es la ayuda que presta a los peques a conocer las emociones y trabajar con ellas.
¿Quién? Desde los 4 años
¿Cuantos? De 2 a 5 emotivos monstruitos
¿Durante? 20 minutos aproximadamente
1 Tablero
1 Monstruo de colores
1 Niña
1 Dado
8 Tarros para guardar las emociones
2 Estantes para poner los tarros
5 Fichas de emociones
Grandes fichas de madera las de el monstruo de colores y la niña, para que los peques las puedan manejar bien. El sistema de los tarros para guardar las emociones está chulísimo.
PREPARACIÓN
Desplegamos el tablero y colocamos a El Monstruo de Colores y a la niña en la casilla rosa (también conocida como AMOR). En las demás casillas dejamos la ficha de cada color.
Los tarros por un lado tienen el dibujo que nos indica a qué emoción pertenecen. Los pondremos en los estantes de manera que no veamos esto.
DESARROLLO
Tiramos el dado y pueden pasar varias cosas.
Si obtememos un 1 o un 2 movemos a El Monstruo de Colores tantos espacios como nos indique el dado. También nos puede aparecer la espiral, con la que nos podremos mover a cualquier casilla del tablero. Una vez en una casilla, el jugador activo tendrá que contar algo que le haga sentir la emoción de esa casilla.
LAS EMOCIONES
Las emociones con las que trabajamos en el juego de El Monstruo de colores son, como en el libro:
Rosa – Amor
Amarillo – Alería
Negro – Miedo
Rojo – Rabia
Azul – Tristeza
Verde – Calma
Si caemos en la casilla amarilla (ALEGRÍA) podremos decir “jugar en familia me hace sentir alegre”.
A continuación elegimos un tarro y le damos la vuelta. Si es del mismo color que la ficha que hemos conseguido introducimos esta en el tarro. Si el tarro es de otro color le volveremos a dar la vuelta y lo dejaremos en el estante.
Si en la parte trasera el color del tarro coincide con la ficha, introdúcela en él.
Pero ¡cuidado! Hay tarros que tienen las emociones mezcladas, si damos la vuelta a uno de estos tarros tendremos que dejarlos girados y además coger otros dos tarros y cambiarlos entre ellos de sitio.
Si en algún momento acabamos con los tres tarros multicolor girados, tendremos que liberar todas las emociones y volver a empezar.
Por suerte tenemos la ayuda de la niña. Cada vez que en el dado nos aprezca la cara de la niña la moveremos a la misma casilla donde esté el monstruo y podremos ayudarle a aclararse con las emociones girando uno de los tarros multiculor.
Esto también sucederá cuando el monstruo se mueva hasta la casilla en la que se encuentre la niña.
¿Y si una casilla no tiene ficha?
En algún momento acabaremos en una casilla en la que no haya ficha, ya sea porque ya nos hemos hecho con ella o porque es la casilla inicial (AMOR). Entonces expresaremos igualmente algo que nos infunda ese sentimiento y volveremos a tirar el dado.
FIN DEL JUEGO
Cuando hayamos logadro capturar las 5 emociones, habremos ganado.